Vestidos de fiesta cortos, ¿son una verdadera opción para esa noche especial?
En cualquier celebración especial e importante, el vestuario cumple una misión imprescindible, porque habla no solo de nosotros mismos, sino de la propia imagen que queremos proyectar a los demás. La elección de un vestido concreto nunca en sencilla, y aunque hay siempre normas y sugerencias de protocolo, también hay mujeres que deciden ir más por libre y buscar el equilibrio entre lo que quieren y lo que deben ponerse. De ahí que en los últimos tiempos, los vestidos cortos de fiesta se hayan convertido en algo muy popular, y no solo durante el verano, donde sí que parecen más apropiados.
Estos vestidos tienen poco que ver con los largos y abren un nuevo abanico de posibilidades a las mujeres que los llevan, sirviendo también para destacar cuando el resto sí que suele llevar vestidos más largos o comunes. Son muchas las ventajas que ofrecen estos vestidos, como veremos ahora, pero el problema sigue estando en saber si son apropiados para el evento al que vamos a acudir, si realmente conviene llevarlo o nos señalaremos demasiado cuando todo el mundo lleve vestido largo. La decisión final está en manos de cada cual, por supuesto, pero nosotros queremos dar algunas claves para facilitarla.
Te harán lucir una silueta más esbelta
Si tienes una bonita figura y te esfuerzas por mantenerte en forma y no ganar kilos de más, estos vestidos más cortos serán mucho más favorecedores que los largos, que no resaltan tanto la figura, sino que más bien la ocultan. Igualmente, aunque tengamos curvas, estos vestidos también nos hacen una silueta mucho más esbelta, y pueden ser apropiados en convites familiares y celebraciones de todo tipo, siempre que sean elegantes, por supuesto. Si te gusta presumir de figura, el vestido corto es una elección perfecta, porque además podrás lucir ese bonito par de piernas que tienes y que tanto trabajas haciendo ejercicio.
Te brindarán un look elegante y sexy
La elegancia y la sensualidad no tienen por qué ser conceptos antagónicos, ni mucho menos. De hecho, hay vestidos que nos pueden hacer sexys mientras que también nos dan ese punto elegante que necesitamos en la celebración. Los vestidos cortos suelen ser considerados más sensuales que elegantes, pero los diseñadores se han esforzado mucho por encontrar ese equilibrio final que haga que todo se funda en una misma prenda, y que ese vestido corto que tanto nos hace destacar también sea el punto de elegancia que nos merecemos. Porque el llevar menos tela no implica que sea menos elegante, como seguramente ya habrás comprobado en más de una ocasión.
Los vestidos cortos: fáciles a la hora de combinar
Y es que una de las mayores preocupaciones de una chica a la hora de elegir su vestido para un evento importante es saber si podrá combinarlo o no con algún bolso que tenga, con sus zapatos o con sus complementos favoritos. Estos vestidos cortos suelen ser más fáciles de combinar con todo eso, por su propio corte y su propia condición, resaltando más incluso esos mismos complementos que con otros vestidos más largos quedarían un poco a la sombra. Evidentemente, esto también dependerá del color que elijamos en el propio vestido y de la forma del mismo, pero te resultará mucho más sencillo combinarlo con unos zapatos o un bolso que resalte, por ejemplo.
Te sentirás muy cómoda durante la velada
Otra de las grandísimas ventajas de llevar vestido corto a cualquier evento importante es la comodidad, y es que no hay que ser demasiado lista para entender que estos vestidos, que además se asemejan mucho más a lo que estamos acostumbradas a ponernos, son más cómodos y fáciles de llevar que uno largo, con el que debemos tener mucho más cuidado a la hora de no mancharlo y demás. Tal vez no sean tan espectaculares, pero es cierto que un vestido corto, sexy y elegante, puede ser una alternativa perfecta para esa noche tan especial, sobre todo si queremos estar lo más cómodas posibles, algo que estos vestidos aportan.
Estilos estampados, con lentejuelas o escotados
Los vestidos cortos suelen ser vistos como una prenda algo más informal, y por eso, los diseñadores tienen más manga ancha a la hora de crear diseños espectaculares y diferentes con ellos. Desde los estampados más llamativos a otros más clásicos, pasando por el brillo de las lentejuelas, que parece haber vuelto con fuerza en los últimos tiempos, y sin olvidar la posibilidad de llevar un gran escote, ya sea palabra de honor o en V, para darle ese toque sensual a nuestro vestido y conseguir que los ojos de todo el mundo se centren en nosotras. Las posibilidades son infinitas, y por eso habrá un vestido corto perfecta también para cada ocasión.